Las 5 Plagas más Comunes en tu Jardín

Hay una serie de plagas y enfermedades que pueden dañar seriamente tu jardín y las plantas que tengas en él. Entre todas las que existen, hay algunas que aparecen de forma más frecuente. Además de esto, se instalan muy fácilmente y cuando se quieren eliminar puedes tener problemas para conseguirlo.

A continuación te hablaremos de las cinco plagas más comunes que puedes encontrar en tu jardín:

1 Cochinillas. Seguro que te suenan estos pequeños insectos que se entrometen en el crecimiento de tus plantas. Si no es así, deberás saber que son una de las plagas más comunes y que a más especies afectan. Provocan la deformación y caída de hojas. También crean manchas blancas o marrones y decoloran la superficie.

2 Pulgones. Éstos deforman las hojas y los brotes de las plantas. Para ello, clavan su pico y absorben la savia de las especies. Hay pulgones de diferentes colores, tales como verdes, amarillos, marrones o negros.

3 Mosca blanca. Este tipo de plaga es muy peligrosa también, puesto que logra que las hojas pierdan color y las llenan de una sustancia pegajosa. Sobre ésta se posa el hongo negrilla.

4 Araña roja. Son unas especies muy pequeñas de apenas un milímetro que es casi imposible detectarlas a simple vista. Para observarlas tendrás que utilizar una lupa.

5 Gusanos. Éstos seguro que sí te suenan. Son los gusanos de suelo. Los hay de diferentes clases, pero los blancos son los más habituales. Para comprobar si los tienes en tu jardín, inspecciona con cuidado el suelo. Puedes escarbar con los dedos para descubrir alguno.

Para evitar estas plagas o prevenirlas hay una serie de remedios. Entre ellos están los plaguicidas como los que te ofrecemos en Happy Flower, las plantas protectoras que las ahuyentan, eliminar parte de las plantas cuando están dañadas o directamente, adquirir plantas que sean resistentes.

Si quieres tener un jardín sano, deberás revisarlo de vez en cuando y hacer una inspección de las hojas de las variedades que tengas en él. No está de más que lo hagas una vez cada dos semanas o siempre que veas algo sospechoso en el aspecto de éstas.